Llegué a casa del cole con las bragas manchadas de sangre por primera vez. Había estado «ensuciando» mis bragas desde la mañana y sin saberlo, fue mi primer free bleeding, una práctica de la que hablaré en este post.
No sabía lo que significaba manchar así que fui directa a contarle a mi mamá lo que me pasaba. Rapidamente mi mamá me enseño paso a paso a usar unas compresas. Además del cómo se ponían y cómo se quitaban, habían otras instrucciones:
- «Cuando te venga la regla siempre debes llevar compresas extra por precaución»
- «Puedes usar protectores diarios para cuando el flujo sea más reducido»
- «Eres muy joven para ponerte un tampón»
- «Debes envolver muy bien la compresa y tirarla. Jamás te olvides de dejar una a la vista»
- «No uses nunca ropa blanca o clara cuando tengas la regla»
Tomemos en cuenta, que a las niñas (mujeres), no nos dejan decidir qué hacer con nuestra regla. Obviamente, las intenciones de nuestras madres, tías, primas, hermanas, abuelas o cuidadoras, que nos enseñan a usar una compresa, son buenas. Sin embargo, desde pequeñas, solo sabemos que debemos esconder que estamos menstruando. Y, en este sentido, esto solo hace que la menstruación en 2021 siga siendo un tabú.
«Desde pequeñas nos enseñan que debemos esconder que tenemos la regla. Manchar es vergonzoso y si es en público, puede ser traumático.»
Estas enseñanzas o creencias nos hacen obsesionarnos por no manchar los pantalones o las faldas. «Que nadie se dé cuenta». Nos levantamos de una silla en un restaurante y le decimos a nuestra amiga que nos mire el culo a ver si hemos manchado. «Todo en orden» y si no lo está, te mueres de la vergüenza o te atas una chaqueta a la cintura para ocultarlo.
Un silencio de respeto por todas las bragas manchadas de sangre
Muchas de esas veces mis hermanas, amigas o novios me han dicho que sí he estado manchada. Desde aquí un saludo a todas las bragas y pantalones que han quedado en la basura con una mancha de la regla👋🏻 .
Pupitres del cole con su manchita roja cuando me he levantado, sillas del trabajo, colchones y aquellos shorts blancos de verano con la mancha que ni la lejía pudo borrar cuando tenía 17 años.
Mi menstruación siempre ha sido abundante. El peor recuerdo que tengo de manchar en público fue a los 21 años cuando mi padre me pidió que fuera a hacer un mandado en el banco. Era verano y hacía muchísimo calor. Había una cola larguísima en el banco y aunque me sentía mojada, pensé que era sudor, hasta que una señora me señaló la pierna en plan «Amiga date cuenta». Había un hilo de sangre que salía de mi vagina hasta cuatro dedos por encima de mi rodilla. Yo respiré, me tapé con una carpeta y aguanté como una campeona hasta que pude irme corriendo al coche.
Primeros pasos del free bleeding o sangrado libre
A pesar de vivir muchas de estas situaciones, no fue hasta que me mudé a España en 2017, que mi piel decidió ser más intolerante al clima y a los productos de menstruación (compresas, salvaslips, tampones). Hace más de un año que me he cambiado a la copa menstrual y no volveré a usar compresas u otros productos.
Sin embargo, a pesar de estar muuuy contenta con la copa menstrual (tengo dos, una de CYCLO y la EurekaCup que alterno entre mis ciclos), a veces mi piel me pide «respirar» cuando tengo la regla.
Tengo una regla que dura siete días clavados, por lo que 7 días sacando y metiendo la copa dos o tres veces al día me cansa.
Es por eso que en el día 1 y en los días ya 5, 6 y 7 de mi menstruación, práctico el free bleeding o el sangrado libre y natural.
🛑 Antes de que pares de leer y pienses que soy una hippie, recuerda que cada mujer es libre de elegir la manera de vivir su menstruación. Puedes usar compresas, tampones, la copa, bragas menstruales, papel o simplemente no llevar nada. No judging.
5 razones para practicar free bleeding
Si tienes ganas de intentarlo pero aún estás dubitativa, te comparto mi experiencia y mis razones:
- Nada que tirar a la basura. Es «liberador» no tener que estar usando compresas o salvaslips que luego tienes que enrollar y tirar para que nadie note que manchas. Normalicemos la regla, que a menos de que tengamos dificultades hormolanes, TODAS sangramos. Sangrar es sinónimo de salud.
- Mejor relación con tu regla. El free bleeding te ayudará a conocer mejor tu cuerpo y tu ciclo menstrual y por ende, mejorarás la relación que tienes con tu regla. ¿No te interesa «trabajar» en tu relación con tu regla? Pues hasta que no te llegue la menopausia (y todo lo que conlleva), vivirás con ella mensualmente.
- No al pH alterado. Los químicos de las compresas y los tampones pueden alterar el pH vaginal y favorecer la aparición de microorganismos dañinos en tu vagina, además de picor, olor intenso e inflamaciones.
- Por pereza. Si tu regla dura muchos días, meter y sacar tu copa menstrual puede cansarte o incluso doler si vas con apuros y no te tomas ese momento de «conectar» con calma con tu cuerpo y tu regla.
- Teletrabajo. Vivimos en pandemia, muchas teletrabajamos y podemos darnos el lujo de estar en casa sin usar nada y dejando que nuestra piel respire.
5 consejos para practicar free bleeding sin morir en el intento
¿Te has convencido? Venga, ¿qué pierdes al intentar? Aquí te dejo unos cuantos consejos para que la experiencia no sea traumática y puedes hacerlo con confianza:
- Toma mucha agua. Además de los miles de beneficios que tiene tomar agua en abundancia diariamente, resulta muy útil al momento de practicar el free bleeding. ¿La razón? Te hará ir al baño con más frecuencia y podrás chequear que todo está en orden. En mi caso, si estoy en un lugar público y veo que estoy sangrando mucho o que la sangre es roja rojita, es hora de ponerme la copa.
- Usa bragas oscuras o bragas menstruales. ¿Te acuerdas de tus bragas rosas sexis de encaje? No uses esas para practicar free bleeding. En mi caso, prefiero usar bragas o tangas de colores oscuros. Al quitármelas las enjuago con agua fría para quitar cualquier mancha antes de lavar en la lavadora con el resto de la colada. En este sentido, elige algodón, pues este tejido permite la transpiración de la piel para que no haya humedad. Otra opción es usar bragas menstruales, aunque yo todavía no las he probado. He visto en Amazon algunas bragas menstruales de algodón ecológico que seguro terminaré comprando, así como este pack de bragas de algodón absorbentes, ideales para pasar la regla con comodidad.
- No tengas miedo a manchar. Cuando pierdes el miedo a manchar, se van también las inseguridades y el miedo al qué dirán. Confía en tu regla, en tu cuerpo y toma las precauciones necesarias para evitar un posible manchado, sin miedos.
- Practica los ejercicios de Kegel. Quizás te suenan familiares. Se trata de ejercicios para fortalecer el suelo pélvico y los músculos vaginales. También son conocidos para mejorar problemas de incotinencia urinaria e incluso, de placer. He investigado, y muchas mujeres aseguran que tras practicar estos ejercicios pueden retener la sangre para varias horas o disminuir su intensidad. Honestamente, no lo he puesto en práctica aunque creo que puede ser un método interesante.
- Hazlo con hermanas o amigas. Si vives con tus hermanas, primas o amigas, coméntales y animaros a practicar juntas el free bleeding. De esta forma, evitas sentirte sola y crearás una «red de apoyo» donde todas pueden compartir sus opiniones.
¿Ya has probado el sagrado libre durante la regla? Déjame un comentario 👇🏻🤗
PD. La imagen que abre este post es una hermosa fotografía de Monika Kozub.